domingo, 10 de agosto de 2014

Cuento III: Borderline



El viento golpeaba su rostro. Recordaba, pensaba, sufría. Ella dijo volveré. Mas el tiempo había pasado y su imagen se desvanecía en una angustia punzante y dolorosa. - Ella prometió volver...

Sobre aquel barranco, sentado, contemplando el mundo, su alma voló y en hermosa regresión, recordó esos momentos de felicidad. Ellos corriendo en esa pradera de espigas azules ( que obsesión con el azul), jugando a la felicidad. Los besos, las caricias... 

El viento lo hizo volver. El dolor volvió a punzar... ¡ya no podía mas!. - Ella prometió volver... y mirando el fondo vio lo lejos que estaba el suelo, tan lejos como su recuerdo y la esperanza de volverla a ver... - Ella prometió volver...

Y su alma volvió a volar al pasado. Ella diciéndole te amo, él diciéndole para siempre. Eran tan felices, hasta que... ella se fue... desapareció, se esfumo... - Ella prometió volver...!!!!

Se puso de pie, miro al cielo, miro sus manos, su corazón, su pasado, su presente... su futuro... - ¡Ella prometió volver!.. grito al viento... ¡corrió! y.... salto...

Mientras su inerte cuerpo era cubierto por el polvo y mojado por una lluvia triste; triste como el canto de los que se van... a la distancia, al mismo instante... una mujer tocaba su puerta...

Ella regreso...  demasiado tarde.


viernes, 8 de agosto de 2014

Cuento II: El Espejo de las Ilusiones Rotas


Y en su soledad, ese cuarto oscuro deslumbraba su dolor, su ansiedad, su angustia... no podía volver a hacerlo, no podía volver allí y verse a ese espejo. ¡Ese espejo!... cuanto dolor veía en él... sentía su energía escapando, devorada por ese cristal ¿deforme?... o, ¿es que lo deforme era él mismo?.

Cada día, cada noche, cada instante le gritaba  - ¡¡¡Eres mi esclavo!!!, ya no eres tu mismo.¡Me perteneces!
Lo había encontrado entre las ruinas de una noche de copas que ya no recuerda. Apareció, así de la nada, simplemente apareció y... se empezó a llevar su alma.

Conversaban despacio en silencio, se miraban y notaba que algo no cuadraba al pasar los días. Cual retrato de Dorian Grey, su rostro se consumía, su vida se diluía... absorbida por el espejo de sus ilusiones rotas. Veía en el sus miedos, sus penas, sus dolores... ¡tenia que huir!, tenia que huir!.

En el suelo, maltratado y oyendo la voz del espejo diciéndole -Eres mio, ríndete... ,pensó que su hora había llegado. 

Mas esa esperanza que no muere le dio fuerzas y levantándose enfrento al espejo, lo tomo,  grito y lo tiro!!!!!... 

La puerta se abrió y salio libre de aquella cabaña oscura. Mirando el amanecer entendió que un tiempo nuevo empezaba...

Y en el suelo los cristales rotos del espejo reflejaban la imagen de un hombre que pronto pasaría por allí... y lo recogería entre las ruinas de una noche de copas.

Continuará...

Rosas en Sus Manos...


Y allí, en sus manos estamos, 
tú y yo, por siempre en sus manos.
Unidos por la eternidad,
por tiempo sin limite...
te amo... 

Blanco y rojo es nuestro amor.
Blanco por lo que Él limpio
de nuestro pasado y presente,
rojo por su sangre que nos libera.
Rosas que hoy están en sus manos,
espinas que cayeron y se desvanecieron,
amor que no duerme,
amor extraño, loco, único.

Y entre las risas de los lirios
y la cólera de la mala hierba,
beso tus labios,
acaricio tus penas,
les digo adiós,
y aun en lo difícil de estar unidos,
grito al viento,
te amoooo!!!

Toma mi corazón,
es tuyo...
besa mis labios,
deja que mi sangre se una a ti..
sentados a la orilla del barranco
decimos gracias a Dios,
decimos te amo...


(A mi esposa Karen Monserrat. En la eternidad juntos)